domingo, 7 de octubre de 2012

Vietnam y los 5 Héroes: una historia de amistad y solidaridad compartida


Desde el inicio de las campañas mundiales a favor de  los 5 Héroes, Vietnam ha desempeñado un destacado papel en la solidaridad  con la causa, a través  de expresiones concretas, motivadas por la amistad tradicional entre Cuba y Vietnam, baluartes en la defensa de principios nobles. Así lo han evidenciado los pronunciamientos públicos de sus principales dirigentes. La solidaridad del pueblo vietnamita con los 5 Héroes ha quedado plasmada en declaraciones oficiales y documentos conjuntos, que definen la naturaleza de los vínculos entre ambos países.


Pero también las muestras de identificación con la causa han salido del corazón de combatientes vietnamitas, intelectuales, estudiantes, universitarios, artistas, entre otros sectores, que reflejan con sus actos los sentimientos del pueblo de Vietnam, reciprocado por los Héroes desde sus prisiones.

Un ejemplo elocuente lo  constituyó  el intercambio de misivas entre la combatiente vietnamita Ho Thi Minh y los 5, hace algunos años. Esta mujer sufrió en carne propia los abusos del régimen títere de Vietnam del Sur en el pasado. Le relató a los héroes cubanos que en aquellos días de prisión  fue torturada, golpeada de la manera más brutal. De acuerdo a sus propias palabras, considera a los 5, parte de su familia y les afirmó: “A ustedes les acompaña la razón, y tengo la confianza de que vencerán. A su lado estamos los vietnamitas hermanos. Luchamos junto a ustedes en una misma trinchera.”

Antonio Guerrero, por su parte le contó a la combatiente sobre su amistad entrañable con un condiscípulo vietnamita, basada en el respeto y el cariño mutuos, en el Instituto de Aviación Civil en la antigua URSS. Y más adelante le dice a la Heroína “con solo saber que a nuestro lado están los hermanos vietnamitas, en la misma trinchera, se llena de fuerzas nuestro pecho y se reafirma nuestra convicción en la victoria.”

Ramón Labañino, en nombre de los Cinco, refiere:” Usted es para nosotros, un ejemplo y una inspiración, en esta batalla diaria, desde las mismas entrañas del imperio, por defender la independencia y soberanía de nuestros pueblos y la conquista de ese futuro mejor que tanto necesita la humanidad(…)Conocer su historia personal y hoy saberla junto a nuestros Cinco, nos da una fuerza arrasadora de convicción en la victoria final frente al mal y la mentira y en la conquista de la libertad.”

Como prueba de esa certeza, Antonio envía una foto junto a un cuadro de Ho Chi Minh que él mismo dibujó. Este episodio evidencia la grandeza de estos hombres, que aún en condiciones difíciles rinden tributo a los próceres universales, y expresan valores inculcados por la Revolución cubana de respeto y solidaridad hacia el aguerrido pueblo vietnamita.


Con la sencillez propia de un artista de pueblo, Le Lam, pintor vietnamita, llevó a su taller de creación la imagen de los cinco. Iluminado por los versos del inolvidable Tio Ho, Lam solo deja ver rostros encarcelados en su obra, pero el espíritu de los Héroes trasciende. Al igual que sus compatriotas, sigue confiando  en que esas rejas rasgadas a trasluz, algún día serán trazadas con las líneas precisas de la libertad.

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